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Cxperience Concept es una devota filigrana Citroën que estimula la pupila. Su potencia de 300 caballos de fuerza y una autonomía eléctrica de 60 km infunde mega-respeto, si es que el mega-respeto existe, si no el Cxperience ya lo inventó.
Cxperience tiene un cuerpo futurista y espectacular sobre colosales ruedas de 22 pulgadas, de actitud audaz y puertas traseras con bisagras para una entrada gourmet dentro de su cabina minimalista. Es el mismísimo idioma del mañana, tal como el cine lo ha captado, pero hecho conceptual realidad por los pupilos de Don André.
En su bunker bajo el capó ronca un sistema de propulsión híbrido plug-in, con motor de gasolina que genera entre 150 y 200 salvajes caballos de fuerza (112 y 149 kilovatios), más 107 caballos igualmente indómitos de fuerza adicional (80 kW), procedentes de un motor eléctrico. Con el poder de los dos combinados, el portento del Cxperience expele 300 caballos de fuerza sobre un pavimento atribulado. La transmisión automática de ocho velocidades montada transversalmente se encuentra entre el motor convencional y un motor eléctrico, con el poder de este último entregado al eje trasero.
Puede ser conducido únicamente en el modo de energía eléctrica durante 60 kilómetros (37 millas) y la batería se puede recargar desde un enchufe convencional en sólo cuatro horas y media. Un makinón muy original como su mismo nombre.
